
Desde el Área de Formación del Colegio de Enfermería de Alicante, a cuyo cargo se encuentra Juan José Tarín, vocal V de la Junta de Gobierno, se pone a disposición de las enfermeras y enfermeros de la provincia un nuevo Cuidado basado en evidencias a través de SalusOne, con quien el Colegio tiene contratada parte de la formación continuada online.
Este Cuidado basado en evidencias aborda el tema relacionado con purgar los conectores sin aguja (bioconectores) y es obra del Dr. José Luis Gómez Urquiza. Su interés viene dado porque es un tema que centra muchas de las preguntas que las enfermeras y enfermeros realizan a través de la sección PREGUNTA de SalusOne.
Los conectores sin aguja o conectores libres de aguja, también conocidos como bioconectores, son dispositivos que favorecen el acceso intravenoso seguro y que se conectan en los extremos de los catéteres. Su función es permitir la conexión entre los catéteres, los equipos de administración de medicación y las jeringas. Su uso se recomienda para la prevención de infecciones y lesiones por pinchazos accidentales.
Respecto a sus características, en su apariencia externa los conectores sin aguja pueden ser opacos o transparentes, siendo esto último ideal para el control de las posibles acumulaciones de restos de sangre o fluidos. En su parte interna pueden carecer de partes o piezas que se muevan, o disponer de un mecanismo valvular para el control del flujo.
Los conectores sin aguja se pueden clasificar en diferentes tipos en función de algunas variables. Por un lado, según el desplazamiento del fluido en el proceso de conexión y desconexión de la jeringa se puede hablar de bioconectores de desplazamiento positivo, de desplazamiento negativo y neutros (previenen el reflujo). Por otro lado, se pueden diferenciar entre los que tienen mecanismo valvular y los que carecen de él, llamados por algunos autores conectores complejos si lo tienen o simple si no es así. También en función del volumen en ml de vacío del dispositivo.
Ninguna de las Guías de Práctica Clínica sobre el manejo de la vía intravenosa y sus distintos dispositivos especifican en ningún caso la necesidad o no de purgar los conectores sin aguja o conectores libres de aguja. Se centran principalmente en recomendaciones para evitar la infección del conector, su manejo y la selección adecuada del conector.
A pesar de la falta de recomendaciones, algo que sí especifican las fichas técnicas o especificaciones de los distintos conectores es el volumen muerto del conector, es decir, los ml de vacío dentro del dispositivo que oscilan entre 0,02ml y 0,1ml.
En conclusión, ante la falta de evidencia disponible no se puede recomendar la necesidad de purgar el conector sin aguja o conector libre de aguja dado el bajo volumen muerto o vacío de los mismos.
BIBLIOGRAFÍA
- Gorski LA, Hadaway L, Hagle ME, McGoldrick M, Orr M, Doellman D. Infusion Therapy Standards of Practice. Journal of Infusion Nursing. 2016; 39(1): S68-S70. Disponible en: https://source.yiboshi.com/20170417/1492425631944540325.pdf
- Consejería de Salud, Servicio Andaluz de Salud (Junta de Andalucía). Guía FASE para la prevención de infecciones asociadas al uso de dispositivos venosos. 2017. Disponible en: http://www.sspa.juntadeandalucia.es/servicioandaluzdesalud/contenidos/publicaciones/datos/670/pdf/guia_fase_dispositivos_venosos.pdf
- Stefano E, Abbruzzese C, Cannizzo L, Lucchini A. In vitro evaluation of fluid reflux after flushing different types of needleless connectors. J Vasc Access. 2016; 0:00.
- Hadaway L, Richardson D. Needleless connectors: a primer on terminology. Journal of Infusion Nursing. 2017; 33(1):22-31.