Pasan los años, pasan las décadas, incluso cambiamos de siglo pero parece ser que hay aún quienes se quedaron en que el monopolio de la sanidad corresponde a una categoría o gremio profesional en exclusiva. Da esa sensación cuando tras conocerse que la Conselleria de Sanidad Universal y Salud Pública de la Comunidad Valenciana confiaba en la enfermera María José Lloria para el cargo de comisionada a fin de liderar la transformación de la Atención Primaria y Comunitaria del Sistema Valenciano de Salud nos encontramos que en muy poco tiempo la consellera ha cambiado de opinión y donde dijo COMISIONADA ahora dice ASESORA. ¿Cuáles serán los motivos?, ¿Quizás la protesta realizada desde el Consejo Autonómico de Colegios de Médicos Valencianos rechazando que una enfermera pueda llevar a cabo tal cometido?
Vamos a ver, la gestión de la Atención Primaria viene siendo históricamente en España, y por ende en la Comunidad Valenciana, un coto exclusivo de los médicos. Sin embargo tenemos una Atención Primaria que no está dando una respuesta efectiva y eficiente a las necesidades de salud que tiene la sociedad, y que además todos los colectivos que trabajan en ella están descontentos de cómo funciona, tanto es así que está considerada como la Cenicienta del sistema sanitario. Ahí lo dejo.
¿Por qué no nos dejan probar a nosotros ahora? Lo digo más que nada porque visto el resultado indicado, igual no es descabellado pensar que otro perfil profesional lo pueda hacer no solo mejor, sino hasta bien. Un título universitario, en la cuestión que nos ocupa, no otorga la capacidad y sabiduría para poder gestionar con acierto. En cualquier caso, si fuera así, hay que señalar que el título de Grado en Enfermería tiene más formación en administración y gestión sanitaria que el Grado de Medicina.
Y centrándome en el caso de mi compañera María José Lloria, deben saber que la ahora asesora no fue designada para el cargo por casualidad. No, miren ustedes, María José viene de estar los últimos seis años al frente de la Dirección de Enfermería de Atención Primaria del Departamento Valencia La Fe, y con anterioridad ha ocupado diferentes cargos de gestión en el sistema sanitario público. Y además atesora una extensa y variada formación en gestión sanitaria que no sería operativo reproducir aquí por tema de espacio. ¡La capacidad gestora de un profesional se adquiere tanto por su formación como por su experiencia!, y les aseguro que en ambos aspectos María José da la talla sobradamente.
A mayor abundamiento, debe tenerse muy en cuenta que la actual crisis sanitaria y su recuperación va a requerir de los mayores esfuerzos en cuanto a prevención, educación, cuidados y promoción de la salud desde el sistema de Primaria y, para dichos cometido las más indicadas para actuar, dirigir y gestionar en estos ámbitos son las enfermeras y enfermeros. Avanzamos como sociedad hacia la igualdad en todos los ámbitos y la no discriminación, así que se hace necesario abrir la mente hacia tolerar que las enfermeras/os somos tan válidos como cualquier otro estamento para gestionar las diferentes parcelas del sector sanitario. Pero es que, además, la sociedad ha cambiado su paradigma de salud, pasando del Curar al Cuidar (véase la cronicidad y la dependencia), lo que hace que las enfermeras/os estemos en excelente posición para liderar el cambio que necesita en este momento la Atención Primaria y Comunitaria en aras de hacer sostenible nuestro sistema de salud.
Aquellos tiempos en los que las enfermeras y enfermeros eran un recurso profesional al servicio del estamento médico no son los actuales. Los profesionales de Enfermería tenemos capacidad científica y plena autonomía técnica para llevar a cabo y desarrollar nuestro rol y nuestras competencias profesionales.
Una visión desvirtuada, alejada de la realidad profesional o retrógrada de la profesión enfermera y de su papel, trabajo y funciones en el sector sanitario, está llevando a no aceptar que otros profesionales puedan ser depositarios de la confianza de la administración sanitaria para hacer cosas que otros, equivocadamente, creen que tienen en exclusiva.
¡Insisto! Es hora de dejar de mirar al pasado y mirar, ya no al futuro, que también, sino al presente. Los cambios, ¡y se necesitan cambios! requieren querer hacerlos a quien tiene la capacidad para promoverlo, tener valor para afrontar las criticas y buscar formulas innovadoras para ello. En este sentido, basta recordar a Albert Einstein: “Si buscas resultados distintos, no hagas siempre lo mismo”
José Antonio Ávila
Secretario General del CECOVA