Patxuka de Miguel Ibañez se define a sí misma como humanista. Sin embargo, Patxuka es muchas cosas. Para muchas personas es la matrona que les ayudó a nacer, para otros es una reputada arqueóloga y destacada integrante del grupo de investigación Pastwomen e, incluso, para el Gobierno de Navarra es una de las siete personas galardonadas con la Cruz de Carlos III que se entregó el pasado 27 de marzo. Este galardón reconoce el importante trabajo científico y humanístico realizado por la Dra. De Miguel, que ha servido para dar voz a nuestros antepasados y para poner en valor la figura de la mujer a lo largo de la Historia.
¿Qué es la Osteoarqueología en la que está tan volcada?
La Osteoarqueología es la disciplina que estudia los restos óseos humanos procedentes de yacimientos arqueológicos. La Osteoarqueología converge con otras disciplinas como la Antropología Física, Paleopatología, la Paleodemografía, que nos permiten obtener una visión de conjunto sobre las características poblacionales de una determinada comunidad pasada en su contexto histórico y demográfico.
¿Cómo se compagina el trabajo de campo en la Osteoarqueología y el trabajo como matrona?
Yo siempre digo que antes de poner mi primera inyección ya había hecho mi primera excavación arqueológica. Para mí, la compaginación de mis dos pasiones siempre se ha dado de una manera natural, yo creo que todo suma.
¿Cómo ha llegado a dedicarse a esto?
Cuando estudié Bachillerato lo hice por la rama de ciencias puras porque era lo que había que estudiar para ser enfermera, pero a mí siempre me había gustado la Historia; cuando estudiaba Enfermería empleaba mis veranos en irme a excavar. Tras acabar Enfermería estudié para ser matrona, llevo trabajando como tal desde 1984. Tras obtener mi plaza fija como matrona y ver que ya disponía de más tiempo me enfoqué en estudiar Historia. Durante la carrera de Historia me recomendaron que me dedicara al estudio de los restos humanos y como me pareció un tema muy sugerente me empecé a especializar en ese ámbito, y así empecé, poco a poco hasta el día de hoy.
¿Qué es lo que más le ha llamado la atención de sus investigaciones en este campo en relación con su especialidad como matrona?
Yo pertenezco a un grupo de investigación llamado PastWomen que está compuesto por investigadoras de diferentes universidades e instituciones culturales y cuyo objetivo es hacer visible y estudiar el papel de las mujeres a lo largo de la Historia. Gracias a mi perfil yo he podido centrar mis investigaciones en el estudio de los restos humanos en relación con la infancia y la mujer, y más concretamente en las complicaciones relacionadas con la maternidad. Tengo diversas publicaciones sobre casos de mujeres fallecidas durante la gestación e incluso tengo documentado un caso de fallecimiento de una mujer en estado de gestación a causa de un prolapso de brazo fetal. Mediante el estudio de los restos óseos podemos conocer diferentes tipos de procesos patológicos, enfermedades carenciales, gestaciones más gestionadas, enfermedades perinatales, etc.
¿Cree que la Osteoarqueología puede ser útil para reconocer el valor de las mujeres a lo largo de la Historia?
Debemos reconocer la presencia de las mujeres a lo largo de la historia y dar el valor que esta presencia tiene. Considero que, ni los hombres han construido la historia solos, ni las mujeres han construido la historia solas. Creo que es necesario una visión integradora donde se reconozca la aportación y el valor de las mujeres en tareas como el cuidado.

El Gobierno navarro le ha otorgado la Cruz de Carlos III por su «destacada trayectoria científica y humanística» ¿Cómo se siente con este galardón concedido en su tierra natal?
En primer lugar, me siento muy agradecida, pero un poco desconcertada también, ya que nunca pensé que me iban a dar un galardón por hacer las dos cosas que más me apasionan, la Arqueología y la matronería.
¿Ha sido una sorpresa la concesión del reconocimiento?
Para mí ha sido toda una sorpresa y además en mi tierra natal. Cuando me avisaron para decirme que me habían dado un premio no me lo podía ni creer.
¿A quién se lo quiere dedicar?
A mis padres que ya no están, a toda mi familia y a todas las personas que me han ayudado. Es importante tener presente y recordar a todas las personas que me han ayudado y me han orientado a lo largo de la vida.